
Arroz frito estilo oriental con vegetales
El arroz frito es una receta versátil, rápida y perfecta para aprovechar sobras del refrigerador.
Utiliza arroz blanco cocido del día anterior para obtener mejor textura y evitar que se pegue.
En un sartén grande, calienta aceite vegetal o de sésamo a fuego medio-alto.
Agrega cebolla, ajo y jengibre picados finamente para crear una base aromática y deliciosa.
Incorpora zanahorias, pimientos, arvejas y otros vegetales cortados en cubos pequeños.
Saltea todo durante unos minutos hasta que las verduras estén cocidas pero aún crujientes.
Empuja los vegetales hacia un lado y rompe dos huevos en el centro del sartén.
Revuelve los huevos hasta que estén cocidos y luego mézclalos con los vegetales.
Agrega el arroz cocido y remueve bien para que todos los ingredientes se integren.
Añade salsa de soya y una pizca de azúcar para un toque salado ligeramente dulce.
Saltea unos minutos más para que el arroz tome color y sabor uniformemente.
Puedes añadir tofu, pollo cocido o camarones para una versión más sustanciosa y completa.
El cebollino picado o semillas de sésamo dan un toque final perfecto al plato.
Sirve caliente y acompaña con salsa picante o encurtidos asiáticos si lo deseas.
Este plato es ideal como almuerzo completo o cena rápida entre semana.
Guarda las sobras refrigeradas y recaliéntalas fácilmente en sartén o microondas.
Adapta los ingredientes a tu gusto o según lo que tengas disponible en casa.
El arroz frito nunca falla y gusta a niños, adultos y comensales exigentes.
Una receta económica, flexible y sabrosa que puedes dominar con práctica.
¡Hazlo hoy y sorprende con un arroz oriental lleno de color y sabor!