Cookies de chocolate blanco y arándanos

Las cookies de chocolate blanco con arándanos secos combinan dulzura, acidez y textura de forma perfecta.
Bate mantequilla con azúcar moreno y azúcar blanca hasta que la mezcla esté ligera y cremosa.
Añade huevos y esencia de vainilla para una base sabrosa y aromática equilibrada.
Tamiza harina, bicarbonato y sal antes de unirlo con los ingredientes húmedos cuidadosamente.
Agrega arándanos secos y trozos grandes de chocolate blanco, mezclando sin romper los ingredientes.
La masa debe estar espesa pero no seca; ajusta con leche si fuera necesario.
Refrigera la masa veinte minutos antes de hornear para mejorar la textura final.
Precalienta el horno a 180 grados Celsius y prepara una bandeja con papel vegetal.
Coloca cucharadas de masa separadas y hornea entre diez y trece minutos.
Las cookies estarán listas cuando los bordes se vean ligeramente dorados pero el centro suave.
Déjalas enfriar en la bandeja cinco minutos antes de moverlas a una rejilla metálica.
Estas cookies tienen una miga densa y un sabor dulce con toques frutales encantadores.
Puedes usar chocolate blanco en gotas o cortar una tableta en trozos irregulares.
Para mayor contraste, agrega nueces de macadamia troceadas, que combinan perfectamente con el conjunto.
Son ideales como regalo casero o detalle para una reunión informal entre amigos.
Acompáñalas con café o té negro para equilibrar el dulzor del chocolate blanco.
Guárdalas en frascos de vidrio para mantener su frescura durante varios días.
Esta receta es versátil y puede adaptarse con otros frutos secos o frutas deshidratadas.
El resultado siempre es visualmente atractivo y con sabores que sorprenden.
¡Haz estas cookies y enamora a todos con su mezcla sofisticada y deliciosa!